Al inicio de un nuevo año es propicio trazarse metas alcanzables y evaluar aquellos aspectos a mejorar en cualquier ámbito, tomando en cuenta los factores con los que se puede maniobrar y otros que están fuera de nuestras posibilidades, pero que por igual podrían incidir en la toma de decisiones trascendentales. Es por tanto oportuno conocer los temas que se perfilan de interés en el 2023 y las perspectivas que giran en torno a los mismos.
En ese orden de ideas, está pendiente la redefinición del tablero geopolítico, en el que incidirán la evolución de la guerra entre Rusia y Ucrania; el afianzamiento de las relaciones entre Rusia y China, en materia de defensa, comercio y energía; y como Estados Unidos asumirá los acuerdos que el gigante asiático está concertando en regiones como Latinoamérica.
Panorama económico mundial
El desempeño de la economía a nivel global es otro tópico relevante y sobre el que difieren expertos en la materia. Unos plantean que la inflación se mantendrá y otros la han bautizado como “la nueva normalidad”. Por igual discrepan sobre los niveles de crecimiento, la posibilidad de que se produzca una recesión en las principales economías, que baje el consumo y que aumente el desempleo.
Mientras tanto, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) prevé que “La desaceleración se acentúe en América Latina y el Caribe, con un crecimiento de 1,4% en 2023, en una coyuntura sujeta a importantes restricciones, tanto externas como domésticas”. El Caribe crecerá un 3,1 %, sin incluir Guyana (en comparación con un 4,3 % en 2022), siendo la subregión de América Latina con mejor pronóstico.
Riesgos sanitarios
Por otro lado, crea incertidumbre la situación sanitaria conforme al comportamiento del Covid-19 y la eventualidad de que surjan nuevas mutaciones o variantes; los brotes de cólera en Haití y la República Dominicana, en esta última bajo control por las medidas que fueron tomadas por las autoridades del Ministerio de Salud, que crearon un cerco sanitario en el populoso sector La Zurza, epicentro de los casos que se registraron recientemente; y el dengue, que viene causando estragos en la región de América Latina, así como otras enfermedades virales, endémicas y de fácil contagio.
Nueva ola de izquierda en América Latina
En otro orden, hay expectativas sobre la rearticulación de la izquierda latinoamericana, con la asunción al poder de Lula da Silva el pasado primero de enero, asumiendo una agenda muy activa que incluyó una reunión con su homólogo colombiano, Gustavo Petro, en la que abordaron temas importantes, como el establecimiento de una alianza para salvar el Amazonas, un cambio en la política antidrogas y la incorporación de Brasil en los diálogos con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), que esta misma semana anunció que no negoció un alto al fuego, situación que puede alterar el curso de las negociaciones por un acuerdo de paz.
El retorno al poder del dignatario brasileño ha sido bien recibido por países africanos, con los cuales aumentó el comercio y la inversión en sus pasados gobiernos, además de fortalecer las relaciones diplomáticas, estableciendo embajadas en 19 países de ese continente.
Desde otra vertiente, citamos el calendario electoral latinoamericano: habrá elecciones generales en Paraguay, Guatemala y Argentina; seccionales y de consulta ciudadana en Ecuador; para Nueva Convención Constituyente en Chile, a los fines de concluir el proceso iniciado en 2022; estatales en México y regionales en Colombia; mientras que en la República Dominicana será un año preelectoral, perfilándose un importante laborantismo político partidario en torno a la “hoja de ruta” que dio a conocer la Junta Central Electoral (JCE), que fue respaldada con recursos por el Poder Ejecutivo, garantizando el montaje de los procesos comiciales. Está pendiente de definición la modificación de la Ley 15-19 sobre Régimen Electoral, que cursa por el Congreso Nacional.
Incertidumbre política
En el caso de Haití, se espera el anuncio de las tres personalidades que conformarán el Alto Consejo de Transición (HCT, por sus siglas en francés), que según las declaraciones del primer ministro Ariel Henry, fue escogido mediante Consejo de Ministros y tendrá la responsabilidad de coordinar la celebración de las elecciones generales.
El proceso electoral en Haití estará bajo la sombra de la inseguridad provocada por las bandas armadas; el reto que tendrían sus autoridades para diseñar el calendario y lograr que se cumpla en los plazos establecidos; garantizar los recursos para el andamiaje electoral, siendo imprescindible el apoyo logístico de la comunidad internacional; y procurar que un importante segmento de la población vaya a las urnas, en un país donde hay amplios niveles de abstención.
En cuanto a Perú, está en una etapa de indefinición, pues no se sabe con certeza que sucederá, agregándose una nueva jornada de protestas políticas y sociales contra la gestión de Dina Boluarte.
En otro tenor, queda esperar cuales serán las proyecciones en torno a la temporada de huracanes en el Atlántico y el comportamiento de los fenómenos naturales en otras latitudes, destacándose por ahora, el intenso frío que se registra en Estados Unidos y Canadá, mejorando la temperatura en nuestro país.
Desde la perspectiva dominicana, están pendientes los resultados del último censo, que arrojará datos demográficos y socioeconómicos, siendo una especie de radiografía de los cambios que ha dado el país en los últimos 12 años.
Debemos ponderar por igual, los resultados de la Encuesta Nacional de Hogares de Propósitos Múltiples (ENHOGAR) correspondiente al 2022, realizada por la Oficina Nacional de Estadística (ONE), que arrojó informaciones inquietantes sobre los temas que mayor preocupación generan en la población, siendo ellos: la delincuencia, el costo de la vida y el desempleo, a los que las autoridades nacionales, en conjunto con los poderes fácticos de la nación, están conminados a buscarle solución.