Parte 2: Una mirada al devenir de los principales ámbitos de interés nacionalEl presidente Bukele tiene desafíos importantes en los ámbitos económico y social. En primera instancia, el país acumula una inflación elevada, estimada por el Banco Central de Reserva (Banco Central) en 7.5 % en mayo de 2022, la más alta de los últimos 26 aňos y que se relaciona con el aumento significativo de los precios de los alimentos, un panorama que no ha empeorado por el subsidio a la gasolina y el gas.
Es de preocupación para algunos sectores el nivel de deuda pública, que compromete un 80 % del Producto Interno Bruto (PIB) del país, según estadísticas oficiales, lo cual motivó al Gobierno “A lanzar una oferta de recompra de deuda externa con vencimiento entre 2023 y 2025, por unos US$360 millones”, despertando el interés de compra de China, la cual ansía ampliar su presencia en la región y está buscando un mayor acercamiento con las autoridades políticas salvadoreñas, emprendiendo negociaciones en pos del establecimiento de un tratado de libre comercio, lo que de seguro generará las inquietudes de los Estados Unidos, desde la perspectiva de que tal posibilidad pueda tomar auge en otros países latinoamericanos que actualmente tienen gobiernos de izquierda.
China también ha respaldado al Gobierno bukelista con la donación de 930 toneladas de harina de trigo que están siendo entregadas a pequeñas y medianas panaderías. Parte de la gastronomía salvadoreña tiene como base diferentes tipos de cereales, siendo este aporte importante para manejar los precios de la canasta básica y con ello el Índice de Precios al Consumidor (IPC), estrechamente relacionado con el tema de la inflación, la cual está muy elevada.
Ante este panorama económico y social adverso, las remesas son un aliciente. El Banco Central de Reserva informó que,” Las remesas familiares recibidas en El Salvador en el periodo de enero a julio de 2022 sumaron US$4,415.7 millones, lo que representa un crecimiento de 3.3 %, equivalente a US$141.2 millones más que en el mismo período del año anterior”. Este dinero proviene sobre todo de la diáspora ubicada en Estados Unidos.
Caída del bitcoin
Otro tema a considerar y que viene a ser un revés para la economía salvadoreña, es la caída en 21 % del bitcoin, que desde septiembre de 2021 es una moneda de curso legal en la que el presidente Bukele ha invertido parte de los recursos del Estado, que ahora están devaluados. Mediáticamente cobra fuerza el planteamiento de que está depreciación de la criptomoneda provocará un descalabro económico en El Salvador, lo que de materializarse podría generar situaciones de inestabilidad social, tomando en cuenta que el rechazo a la adopción de este sistema de pago en el país centroamericano fue uno de los motivos de la articulación del movimiento social de protesta en el 2021.
Desempleo
Y aunque no hay reportes oficiales actualizados sobre el desempleo y los indicadores de desigualdad, para tener una idea tomamos como referencia la Encuesta de Hogares y Propósitos Múltiples (EHPM), avalada por la Oficina Nacional de Estadística y Censos de El Salvador, que en agosto de 2022 reveló lo siguiente: “La situación de generación de empleo se mantiene estancada. La tasa de desempleo de la Población Económicamente Activa (PEA) volvió prácticamente a los niveles de precrisis, cerrando en 2021 en 6.3 %, menor a la de 2020, que fue de 6. 9 %, y levemente mayor a la de 2019, que fue de 6.1 %”.
Lo que se percibe es que para no alarmar a la población no se ofrecen estadísticas actualizadas, recurriendo a visualizar y contrastar las que se tienen de periodos anteriores.
De su lado, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) dio a conocer en agosto de este aňo que, “La economía de El Salvador es la que menos crece de Centroamérica”, revelando además que, “El país regresa a la senda de bajo crecimiento que traía previo a la crisis de la pandemia, ya que la proyección es que este 2022 crezca un 2.5 %”.
A todas luces, el éxito de los aprestos reeleccionistas de Bukele estará supeditado no tan solo a la enmienda constitucional, sino a como logre timonear los destinos de una nación que atraviesa por turbulencias económicas que se estarían manifestando en el contexto social, pues tal y como se aprecia, de El Salvador abundan informaciones, pero también hay mucha desinformación oficial sobre lo que realmente acontece en sus diferentes ámbitos de interés nacional.
